Hace tiempo empecé a recopilar, a través de las fotos, momentos hoy casi olvidados de no haber sido por ellas. Son muchas las cosas que me vienen a la memoria cuando abro un álbum de fotografías sacado de mi escritorio. Estas fotos son más que una imagen, son como pequeñas cajas que al abrirlas liberan de su interior sonidos, risas, recuerdos... sensaciones que me hacen revivir las escenas.
Son como un regreso al pasado y, a veces, cuando las tomo en mis manos las devuelvo a su lugar temerosa de que su memoria me deje vencida, me haga volver a revivir los momentos que tan felices y que tanta nostalgia me causan al recordarlos.
Son como la máquina del tiempo, pero hoy lo he tomado en mi mano, pertenece este álbum a mi primera etapa de casada. Esa etapa en que la vida aparece ante nosotros como algo maravilloso. La vida se abre ante la juventud como un abanico de colores. Pero algo me faltó y si pudiera volver a esos años, contemplaría más atardeceres. Iría a tantos lugares que no he visitado. No le daría tanta importancia a cosas que no la tienen.
Seguro que mi ropero estaría más vacío. Pero me hubiera dejado menos horas de trabajo y más tiempo dedicado a mis hijas. Mas la vida no me lo permitió, una vez me subí a su tren tuve que correr a la velocidad que ella me impuso. Huir de la miseria de una guerra, que nos dejó marcados a todos los de esa época.
Pero sí tuve muchos días de alegría y satisfacción, ya que la conciencia me dice que hice lo propio en cada instante. Así es la vida. Ahora tocan las vacas flacas nuevamente por las malas gestiones de los gobiernos, por el enriquecimiento desmedido de tantos egoístas. Es el momento de ver en qué podemos ayudar. Y ahí me veo en la última foto contemplando el fruto de mi árbol.
Este momento no me lo puedo perder. Disfruto y me preocupo de que esas pequeñas ramas se formen para que sean ellas mismas y crezcan en el bien para ser la savia de los nuevos tiempos que nos esperan.
Que crezcan en la conciencia del no egoísmo, para que jamás demos pasos hacia atrás, ni deseemos nunca regresar al pasado.