jueves, 27 de junio de 2013

A LA STA, LAURA (OLOR DE SANTIDAD).



Llegaste al jardín de tu camino
con santidad sublime y trasminada.
Fuiste madre sin partos, derramada
en humano sentir de amor divino.

Fuiste manos abiertas con destino
a la gracia de Dios en ti lograda;
... venero limpio de alma perfumada
para cambiar desgracia y desatino.

Ya eres, entre los Santos, fe que induce
a los mortales de tu luz fraterna
al gozo en santidad que en ti seduce.

Y hay en la luz que alumbra tu lucerna
el aliento de Dios que nos conduce
a la promesa de la Gloria Eterna.


• COPYRIGHT-JOSÉ MARIA LOPERA
(Medalla de Oro de la Ciudad de Álora)

lunes, 24 de junio de 2013

El verano, ya llegó.


 
He querido saludar, con mil preciosas palabras,
la llegada del verano.
Y mi propio sentimiento, me dijo que me callara,
pues todo sería en vano.
En silencio contemplé, la hermosura de los campos,
los viñedos, los frutales, los pájaros y sus cantos,
las palmeras y los olores del jazmín,
las playas con sus encantos y el murmullo de las olas.
Así fue que pude oír, el silencio abrumador,
que me dictaba paciente, el sentir del corazón.
Y me dio muy elocuente, una lección verdadera.
“Que las palabras no llenan, lo que el alma lleva dentro,
cuando tiene sentimientos, cuando la inspiración llega”.
Y es que el verano ha llegado, con todo lo que conlleva.
Vacaciones, días de sol, visitas de familiares,
tertulias, cantos de amor, con alegría y calor.
¡¡Señores yo le deseo, que tengan un buen verano!!.
Y...¡ Muchas felicidades!.
Mª Ángeles López

jueves, 20 de junio de 2013

A la enciclopedia Álvarez.


Nombre de la enciclopedia que me inició en el saber.
Fue mi primera maestra, en ella pude aprender
todo cuanto deseaba, las materias principales
 y las que más me gustaban, eran esas poesías que aún
recuerdo con nostalgia.

En sus páginas conocí las gestas de Don Pelayo,
las batallas del Mio Cid y los números primarios,
la geografía de España y la otra, la universal,
a Gerardo y a Machado, a Teresa y a Pemán.

Era una enciclopedia de pedagogía eficaz.
Hacía que lo comprendieran hasta el menos intelectual.
Tanto en los colegios públicos,
así como en los privados, fue el catón nacional.

Fueron varias generaciones, las que en este hermoso libro,
como fuente del saber, bebieron en su manantial.
Y fue el primer “alimento” de nuestros científicos e ingenieros
políticos y empresarios, como de los carpinteros.

Somos los niños de ayer, que se contaron por miles,
los que les damos las gracias y así queremos decirle:
“Muchas gracias Don Antonino,
siempre presente estará, con infinito cariño,
como cuando éramos niños,
Nuestro Álvarez nacional”.

María de los Ángeles López

miércoles, 12 de junio de 2013

Esta mañana, el verano quiere entrar.

 
Yo quisiera describir mi sentir
al percibir el olor a mar Atlante,
y a los mirlos parlantes en mi trozo de jardín.
Los saltos y picoteos de alegres pajarillos,
el eco que desde lejos se oye,
el de los chiquillos desde el patio del colegio.
Las montañas adornadas, vestidas de mil colores
de la retama canaria encopetada de flores.
Y como siempre me ocurre, me han llegado los recuerdos
cuando he visto una foto, aquí en mi ordenador,
que alguien con mucho arte, ha hecho sobre mi pueblo.
Ha querido expresar, según me cuenta su autor,
que los libros representan, el sentir del corazón
y cada cual lo interpreta, como lo cree mejor.
La algarabía sonante, de todos estos instantes,
que disfruto desde mi casa, me ha llevado en un momento
a otro lugar que quiero y llevo en mi pensamiento.
Y es que en estos momentos, siento de verdad hermanos,
la sensación y el disfrute, de la entrada del verano.
 
Mª Ángeles López.

viernes, 7 de junio de 2013

AL IGUAL QUE LAS CHICHARRAS


Conservo aún el recuerdo, en el fondo de mi alma,
de esos largos recreos, que en la puerta del convento,
sentadas en la baranda, para el atardecer,
en el colegio nos daban.                                             

Y cuando el sol se marchaba, los campesinos sentados
a la sombra de las parras, esperaban ilusionados.
Y como si fuésemos hadas, se quedaban extasiados
en las tardes de verano, si nuestro coro cantaba.

Si nuestras voces sonaban, entonces enmudecían.
Los cantos de las chicharras. Al parecer, entendían
que a los buenos campesinos, nuestro coro, les encantaba.
Era el coro de las niñas, de la Señorita Laura.

Cantábamos, verdiales, fandangos, y malagueñas,
sevillanas y canciones regionales, de casi España entera.
Canciones de muchos lados y...un sin fin de melodías
que nos iban enseñando.

Recuerdo algunas de ellas. Lo hago con sentimiento,
pues la inventamos nosotras, y aunque pasados los años,
las tengo en mi pensamiento.
Por ejemplo: una era, “La Torre del convento.”-

Y cómo les voy diciendo, una lista interminable,
haciendo que los vecinos, al final de cada día,
después de duras jornadas, pasaran un rato agradable.
Ellos mismos nos decían (y así nos daban las gracias):

“No dejéis de cantar nunca, que al igual que las chicharras,
es un canto de alegría, que alegra nuestra jornada.
¡Seguid cantando, mis niñas!. ¡Niñas de la señorita Laura!
¡Seguid cantando mis niñas!, pues nos alegráis el alma”.

María de los Ángeles López

jueves, 6 de junio de 2013

De sueños, suspiros y flores.


Hay mañanas de gloria,
tardes de suspiros,
novelas sin historia y
despertares dormidos...

Hay sueños que se cumplen,
planes que que nunca llegan,
hay voces que no se escuchan,
sumergidas en la lucha.

Hay deseos incumplidos,
deseos inesperados.
Hay hombres muy decididos,
y hombres acobardados.

Hay vidas de primavera,
y vidas de puro invierno
Hay hermosas doncellas,
y galantes caballeros.

Hay amores que te esperan.
Con flores que hacen daño,
por miedo a que nos duelan,
con el paso de los años.

María de los Ángeles López