María nunca pudo aprender estudiando, porque cada vez que estaba por instruirse en algo, le llegaba un hijo, y con él, una nueva felicidad la ocupaba; ahí empleaba todo su tiempo y nunca tuvo ocasión. Su aprendizaje fue la propia vida. Sin saber que para su esposo e hijos ella resultó ser la maestra.
Les dio un gran ejemplo de entrega y amor, en una época de carestías, en la posguerra; hacía malabares para poder tener comida, ropa y una palabra de amor para todos y cada uno de ellos, que fueron seis. Ella dio de mamar a varios niños del pueblo al tiempo que lo hacía con los suyos. Generosa al máximo. Así era esta mujer.
La vida es el arte del encuentro. Somos hijos del amor; por tanto, nacemos para ser felices, y esto María lo sabía desde lo más profundo de su alma, ya que vino al mundo y su madre no tuvo las fuerzas de seguir con vida para criarla; se marchó a la otra vida, dejándola al amparo de sus abuelos, que la criaron con una cabrita que la amamantaba.
Por cosas de la vida, su padre rehízo la suya y ella sufrió siempre no poder disfrutar de ninguno de los dos. A los 14 o 15 años, llegó al pueblo de Álora procedente del Chorro, a vivir con su tía María, que se casó con Pedro Gutiérrez. A los 19 años, María se casó con Francisco Gutiérrez, y así fue como formó una gran familia.
Francisco Javier, el más pequeño, me contesta a una pregunta que le hago, porque no recordaba quién de ellos se perdió un día en la romería. Me contesta que era él el que se soltó de la mano de su padre y entre tanta gente les fue imposible encontrarse hasta pasadas varias horas.
Esto, en resumen. La primera comunión la hizo Francisco a escondidas de todos, compinchado con el sacerdote Francisco Ruiz Salinas. Todo para que su madre no sufriera por no poder comprarle el traje.
Así era María, esposa, madre y abuela de los apodados cariñosamente en Álora 'los Silleritos', que hoy van recordando uno a uno cosas entrañables que todos acuerdan en resumir en dos: Un ejemplo de mujer llena de ternura y educación que les supo transmitir y de lo que se sienten muy orgullosos.
Prometieron reunirse todos los años el día de Navidad para compartir. Y así lo hacen. Así era María Trujillo Vera. Sabía que esa promesa los haría permanecer unidos.
08-10-2012 18:13:27 Jose dice:
ResponderEliminarEra una señora como la copa de un pino. Una mujer excepcional. Grande de cuerpo y más de alma.Tuve la suerte de conocerla...
09-10-2012 10:12:34 Angeles lopez dice:
EliminarAmigo José. Ella era así. Una mujer grande y una gran mujer, con todas las letras. No pasará a los anales de las heroínas. Tampoco será conocida por un gran circulo de personas "interesantes" pero sembró la semilla que dio frutos y ahí está. Por eso, yo, que también tuve la suerte de conocerla, hoy le he dedicado mi recuerdo. Gracias por tu valiosa aportación. Un abrazo.
10-10-2012 15:21:03 JAG dice:
ResponderEliminarA veces Ángeles la grandeza no esta en lo pomposo, en aquello que deslumbra, sino en las pequeñas cosas humanas , sencillas, pero que al ser puntiaguda penetra hasta lo más hondo del ser y se queda al resguardo, de enseñar lo primordial de la vida. Amor.
10-10-2012 19:33:29 Angeles lopez dice:
EliminarLo has dicho lo mas claro posible. Hay veces , y son las más, nos dejamos llevar por lo brillante y grandioso. ¿hay algo mas grande que lo que esta señora, María, como tantas de su época que hicieron de Su vida un ejemplo?.GRACIAS POR TU COMENTARIO. UN ABRAZO.AMIGO JAG.
10-10-2012 22:34:27 Francisco Gutierrez Trujillo dice:
ResponderEliminarAngeles leyendo estas letras,he tenido que llorar por tantos recuerdos de mi MADRE que se me han venido a la cabeza,muchas gracias por tener este detalle tan bonito con mi MADRE en nombre de toda nuestra familia, te mando un abrazo con todo el cariño que Tu te mereces. gracias
11-10-2012 19:03:45 Angeles lopez dice:
EliminarFrancisco, me imagino tu reacción. Los sentimientos están ahí pero cuando alguien los remueve... es emocionante. Yo, la tengo en muchos momentos de mi vida. Ya tu lo sabes el como quería a su Angelita. Ha sido una oportunidad de contar cuanto la recuerdo. Un abrazo.
11-10-2012 02:33:49 FRANCISCO GUTIERREZ dice:
ResponderEliminarNo hay palabras en el diccionario que pueda igualar la grandeza y la fuerza que tenía mi "abuela María", lo mejor que hay en la familia los silleritos y su recuerdo siempre está presente en nosotros.Allá donde estés, decirte que toda tu familia al completo te quiere y te querrá, por todo eso y más.TE QUIERO ABUELA Y NUNCA TE OLVIDARÉ.
11-10-2012 19:14:05 Angeles lopez dice:
EliminarFrancisco, Tu abuela María se forjó en la fortaleza de espíritu. Trabajadora, cariñosa,y muy alegre. Así, educó a sus hijos, que para mí, son una buenísimas personas, y por lo que conozco, todo el pueblo los reconoce como tales. Te felicito por ella. Un abrazo. Gracias por tu participación en mi escrito.
11-10-2012 16:17:54 MARINA dice:
ResponderEliminarTuve la suerte de conocerla y aún más suerte que conozco y disfruto de la amistad de toda su familia, de todos los silleros, un cariño muy especial a mi amiga Adelaida a quien mis propios hijos la conocen como tita Adelaida. María como bien han comentado era una mujer muy grande...cómo grande era su amistad, sus valores, su sabiduría, sus principios,su fé.........etc etc .Angeles, enhorabuena por tu precioso articulo
11-10-2012 19:18:12 Angeles lopez dice:
Eliminar. Felicidades por tu amistad con ellos.Gracias a ti, Marina. Sabía que podrías aportar algo mas a mi artículo por el conocimiento que tienes de ella.Has hodido corroborar mis palabras
11-10-2012 23:55:31 Francisco Gutierrez Trujillo dice:
ResponderEliminarDespues de haber leido tu articulo, he vuelto a hacerlo escuchando la cancion de Jose Manuel Soto volver a verte, que yo la he cantado alguna vez, esta cancion se la escribio a su madre a los pocos años de haber muerto,escuchala si no la conoces, en youtube.
12-10-2012 11:48:35 Angeles lopez dice:
EliminarhLttp://youtu.be/uOlOrUtINZE. Creo sea esta.Es preciosa. Me pongo en tu lugar. Siento haber removido tantos recuerdos. Pero... es tan bonito recordar. Un abrazo.
12-10-2012 11:39:40 pilar jurado de miguel dice:
ResponderEliminarAngeles: Hablar de Maria,es casi un nudo en la garganta,aun recuerdo cuando entre en la casa de la calle de la Parra, del entierro de mi madre, y se abrazo a mi y me dijo " Aqui tienes a tu madre, tu no te has quedado sin ella, porque me tienes a mi" y es cierto, era una mujer mayor con la que yo hablaba de todo de amores, de politica,de la vida en general y todo lo escuchaba sin escandalizarse y siempre tenia la palabra correcta en el momento adecuado. Siempre estaba esperando que cualquiera de nosotros llegaramos del trabajo, para sentarse a la mesa y no comieramos solos, siempre era la que ponia la risa en el momento que tu llorabas. Para mi fue una madre insustituible que siga viva en mi corazon ,porque ni un solo dia la he olvidado. Como todos nosotros.
12-10-2012 13:56:19 Angeles lopez dice:
EliminarCon tu gran testimonio, das más de lo que yo esperaba. Llamarte prima es aceptar que ella era tu madre. Conoció la orfandad nada más llegar a este mundo y creo que por ese hecho, no podía ver sufrir a nadie que también la sufriera. Muchísimas gracias por tu aportación. Un fuerte abrazo. Prima Pilar.
13-10-2012 12:12:53 Marisa K dice:
ResponderEliminarHola Ángeles, aunque no conocí a esta señora, ni sabía nada de ella, me encanta como la describes y como se emocionó su hijo al leerlo.Eres una graaaan escritora,llena de sentimientos y tienes esa magia para hacérnoslo llegar a todos.Felicidades!!!
13-10-2012 13:35:27 Angeles lopez dice:
EliminarQuerida amiga Marisa K. Como siempre fiel seguidora de mis escritos. Me alegra los disfrutes. En este caso, esta señora merece todo mi cariño y doy fe de lo que cuento. Un fuerte abrazo.