Dime
abuela: ¿El abuelo dónde está?.
Se marchó
en aquella estrella, buscando la eternidad.
¿Y las
estrellas que son?.
Son
luceros en cadena, son las luces que iluminan el sendero, de todos los
abuelitos , que van camino del cielo.
¿Dónde
van las almas buenas?.
Si mi
bien, ellas semejan, alfombras de perlas, que bordadas por el fuego, las
esparció un angelito, entretenido en sus juegos.
¿Y de que
colores son?.
Unas
doradas, otras azules y plata, cual rayos de mil colores, que se le escapan al
sol, como requiebros de amores.
¿Como yo
amo a mi abuelo?.
Así mi
amor. Luego ese ángel travieso , al llegar el nuevo día , nos repartirá su luz,
llena de nueva energía.
¿Nos las
devuelve a nosotros?. ¡Abuela cuanta alegría!.
¡Pero, yo
quiero subir!...
Tu, no
puedes todavía, con la energía que trae, vivirás feliz de día y por la noche,
mi bien, soñarás con alegría y como en un cuento de hadas oirás una poesía, y
cuando seas mayor y veas el cielo estrellado, podrás escribir poemas a sus ojos
plateados.
Tu abuelo
sonreirá de ver a su nieto amado.
Desde
allí te enviará con su estrella, un gran regalo.
Esa
energía que un ángel en el cielo ha olvidado.
¿Recuerdas
al ángel travieso? ¿Aquel ángel despistado'. Mándale a tu abuelo un beso y
duerme niño a mi lado, por que aquel ángel travieso le subirá tu recado.
María
Ángeles López.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por leer mi Blog!. Deja tu opinión aquí.