Me gustaría saber qué siente un ser humano reventando un avión, un autobús, un tren repleto de personas con ansias de vivir que van a trabajar o a conocer el mundo, o a soñar con el encuentro de un nuevo amor. Quisiera saber qué siente el ser humano cuando está tendido en la calzada, desmembrado, sangrando, horrorizado.
Me pregunto: ¿Qué pueden sentir esos desalmados, locos, insensatos, cuando arrasan la flora y fauna de un bosque convirtiéndolo en cenizas?
¿Qué sentirán esos bosques -pues creo que sienten- cuando ven esas llamas cerca con sus estruendosos chasquidos?
La verdad es que muchas veces me pregunto hasta dónde puede llegar la maldad del hombre resentido.
Creo que esta maldad surge del deseo de saber cada vez más y emplear estos conocimientos de forma indebida y con fines solamente lucrativos. Nuestro ego nos traiciona. ¿Se trae ya al nacer ese instinto tan posesivo que nos lleva a cometer tan horribles daños?
Si observamos a un niño, vemos cómo destruye los juguetes sólo por averiguar que tienen dentro. Ellos no quieren romperlos, pero seccionan lo que tanto desean y tanta alegría les ha producido por el solo hecho de llegar a saber de qué y cómo están formados, pues les gustan pero esa curiosidad les puede.
A esto no le llamaría maldad, pues aún no tienen uso de razón. Esta tendencia crece al mismo ritmo que el niño, que de mayor tiene que procurar que estos conocimientos sean encauzados para el bien. Ahí es donde puede estar el brote que me sugiere la pregunta.
Traemos al nacer la bondad y la maldad, hay que aprender dónde está el límite de lo bueno y lo malo. No se pueden traspasar los límites de la ética y la moral; cuando esto sucede, matamos por odio, dinero, celos... Pero no todos los humanos cometemos estos actos.
Ahí entran muchos factores que me gustaría conocer, pero es una pena que sigamos teniendo que ver y sufrir estos hechos.
El bien que hagamos nos dará una satisfacción interior que es la más dulce de todas las pasiones.
17-09-2011 23:33:51 M. Angeles.lopez dice:
ResponderEliminarAmigo Totero Que feo lo pintas. ¿Y si intentamos corregir? Un abrazo.
17-09-2011 22:27:22 Totero dice:
La maldad es la norma y la bondad la excepción, y por otra parte, los humanos son los únicos seres vivos que disfrutan haciendo daño a sus semejantes. Somos un error de la naturaleza...