11-04-2011 12:19
no olvides nunca jamás
que, si le brindas cobijo
y los tratas con piedad,
de posibles desatinos
Los libros te guardarán.
(Antonio Vergara)
Mi mejor amigo, mi maestro, mi consejero; en el encuentro la más fiel compañía en mi soledad. Junto a el, ese silencio que siento a mi alrededor se puebla de voces, el vacío se llena de fantasía... ¿Qué sería de mí sin este ser al parecer inerte, pero que desde que lo abro y leo sus primeras líneas se transforma en vida? Con el, el mundo pasa a ser mío, me apropio de su contenido. Como dijo un poeta: "¡Ahora poseo dragones y dioses y lunas!".
Cuando leo y escribo, me siento viva, por tanto pienso que es sinónimo de existir. Yo veo al libro como un cielo repleto de sabiduría, a el se han ido incorporando todas las ciencias, las conquistas y derrotas ganadas y perdidas tanto en las bélicas como en las del espíritu. En el encuentro cielos repletos de nubes y fantasías. Al leer, mi espíritu viaja por lugares estelares con el deseo de descubrir el más allá, lo que la vista no llega a alcanzar, lo misterioso.
Ahora me apetece investigar cómo viven las personas, y siempre juntos nos metemos en cualquier época de la historia. Me cuenta todo lo que quiero saber en cada ocasión. Me habla del lugar en el que nos encontramos. Nos metemos en cualquier parte. Palacios, embajadas, congresos, incluso en la ópera, en un circo; sin necesidad de pedir audiencia ni comprar entradas.
Subimos en un avión que nos lleva a países nunca vistos y nos perdemos hasta quedar extenuados de tanto divertimos, pasearnos, reírnos; visitamos museos, nos acercamos a un parque tranquilamente, sosegados, con el solo deseo de encontrar reposo y, cuando llega la noche, lo invito a que se quede conmigo hasta que el sueño me rinda. Él me hace compañía.
Es mi alma gemela. Siempre está junto a mí. Me enseña, aconseja, consuela, atiende y guarda lo que en el escribo. Me habla de amor, de la ternura de una madre, la suavidad y el perfume de una flor, pero también del odio. ¡Sí! de ese odio que separa a los hermanos, a los pueblos, a las naciones; ese que nos hace retroceder tantos pasos en nuestras vidas. De ese odio inútil.
Con el siento que... Mis amigos me podrán abandonar, ignorarme mi familia, el mundo entero me puede dar la espalda. La muerte, arrebatarme a mis seres más queridos, la enfermedad postrarme en el lecho. Pero... el que no me dejará por ningún motivo mientras me quede un poquito de vida, será... Mi eterno compañero. ¡El libro!
12-04-2011 13:24:47 M. Angeles.lopez dice:
ResponderEliminarEstimado amigo. Si de algo estoy contenta es de que personas como tu me digan esto. Asi lo siento y es como suelo explicar mis sentimientos. Quizas me adapto más a los niños que a los mayores, pero me siento bien, muy bien. Ese mundo es el mio. Muchas gracias por compartir opinión y por darme la enhorabuena. ¡Nunca biene mal un poquito de éstimulo!.
12-04-2011 00:23:40 Carlos Perez Torres dice:
Amiga Mª Ángeles: has escrito un artículo sencillo y emocionante, de una temática -como sabes- muy querida para mí. La sencillez es la virtud principal de la literatura que mejor llega, y tú hablas de amistad, de consejos, de sabiduría, de compañía, de enseñanzas, de consuelo... poniendo notas de color con dragones, dioses, lunas y nubes, ríos y lagos, palacios, óperas, circos, aviones, museos y flores. ¡Ya me gustaría a mí resultar tan ameno y tan convincente como tú cuando les hablo a mis alumnos de ESO de los beneficios de la lectura!(...) Enhorabuena.
11-04-2011 22:48:22 M. Angeles.lopez dice:
José. Los libros son los que perpetúan nuetros sentimiento si tenemos la brillante idea de almacenarlos en ellos. Esto es lo que hace que sean, tan sabios, tan silenciosos, con esa ciencia recojida de la propia vida. Solo falta que sepamos apreciar este tesoro. Haremos esta conmemoración próxima tomando conciencia de ello. Un abrazo amigo José.
11-04-2011 21:30:46 M. Angeles.lopez dice:
Estimado amigo Totero. ¿Por qué habría de dudar de ti? Mereces toda mi credibilidad. Eso además ha sido un rescate de los buenos. ¿Que puede sentir un escritor viendo obras al lado de un contenedor de basura? ellas son como sus hijas. Hicistes lo mejor. Gracias un abrazo.
11-04-2011 21:22:24 M. Angeles.lopez dice:
Gracias. En verdad es lo que siento. Un mismo libro se repite muchas veces. Es muy dificil perderlo de una forma radical. En cambio un amigo de humano nos lo arrebata la muerte. Ese es el sentido de su permanencia a mi forma de ver.Me alegra que lo veas asi y que te emocione. Con ello me animas a seguir.Creo que tambien eres buen amigo. Un afectuoso saludo.
11-04-2011 20:55:06 Jose dice:
¡Y, pensar que hay gente, que vive de espaldas a todo lo que encierran los libros!
11-04-2011 14:15:25 Totero dice:
Pues aunque te cueste creerlo, tan solo hace una semana que paseando por la ciudad, me encontré al menos veinte de estas fantásticas criaturas que tan bien describes, junto a un contenedor de basuras pues los habían abandonado... No pude evitar la tentación de adoptarlos a todos... Un abrazo
11-04-2011 13:51:18 Jose Luis Delgado dice:
¡Te felicito, querida Angeles!. Tu artículo es el mejor que he leído entre otros tantos sobre el libro. Es todo un canto al saber, a la amistad y la fidelidad; con el, sin palabras "rebuscadas" ni frases intencionalmente "impactantes", has logrado emocionarme. Gracias y un abrazo.